1. ¿Quién creó al hombre y cómo lo hizo? Génesis 1:27; 2:7
27 Y Dios creó al hombre a su imagen. Lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó.
7 Entonces, del polvo de la tierra Dios el Señor formó al hombre, e infundió en su nariz aliento de vida. Así el hombre se convirtió en un ser con vida.
LA MUERTE
2. ¿Qué es la Muerte? Eclesiastés 12:7
[Entonces el polvo volverá a la tierra, de donde fue tomado, y el espíritu volverá a Dios, que lo dio.]
3. ¿A qué compara Jesús la Muerte? Juan 11:11-13
[Dicho esto, agregó: «Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy para despertarlo.» Entonces, sus discípulos dijeron: «Señor, si duerme, sanará.» Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro, aunque ellos pensaron que hablaba del reposo del sueño.]
4. ¿Sabe algo quien ha muerto? Eclesiastés 9:5-6
[Dicho esto, agregó: «Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy para despertarlo.» Entonces, sus discípulos dijeron: «Señor, si duerme, sanará.» Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro, aunque ellos pensaron que hablaba del reposo del sueño.]
4. ¿Sabe algo quien ha muerto? Eclesiastés 9:5-6
[Ciertamente, los que viven saben que un día morirán; pero los muertos nada saben ni nada esperan, porque su memoria queda en el olvido. También mueren con ellos sus amores, sus odios y sus envidias, y jamás vuelven a participar en nada de lo que se hace bajo el sol.]
5. ¿Qué ocurre con el “Alma'”? Ezequiel 18:4
[Todos ustedes son míos. Lo mismo el padre que el hijo. Sólo morirá quien peque. Nadie más.]
[Todos ustedes son míos. Lo mismo el padre que el hijo. Sólo morirá quien peque. Nadie más.]
6. ¿Debemos consultar a los muertos? Deuteronomio 18: 10-1 1
[Que no haya en ti nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni nadie que practique la adivinación, ni sea agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino,ni mago, ni nadie que consulte a los muertos.]
1. Consolarme en la esperanza de la resurrección (1 Tes. 4:13-18)
2. Creer en Jesús (Juan 1 1:25)
3. Perseverar hasta lograr la inmortalidad que Dios me dará (Rom. 2:7)
ESTUDIO ADICIONAL
La muerte es cesación total de la vida.
La muerte es cesación total de la vida.
La muerte es un retorno al polvo (Ec 3:20).
No se goza ni sufre más (Ec. 9:5-8).
Deja de ser (Sal 104:29). Terminan los pensamientos (Sal 146:4).
No se participa más de las preocupaciones de los vivientes (Job 14:21; Sal 6:5).
Inmortalidad.
Sólo Dios es inmortal (1 Timoteo 1:17; 6:15,16).
El hombre es por naturaleza mortal (Isaías 51:12).
Su carne es mortal (2 Cor. 4:11).
El alma también es mortal (Ezequiel 18:4).
La inmortalidad será concedida después de la resurrección (1 Cor. 15:52-55).
Cristo, esperanza de vida.
Cristo promete dar la vida eterna (Juan 10:27,28).
Cristo quita la muerte y saca a luz la vida (2 Timoteo 1: 10).
Jesús tiene las llaves del infierno y de la muerte (Apoc. 1:18).
LA VIDA Y LA MUERTE
“Si el hombre muriera, ¿volverá a vivir?” (Job 14:14). Esta es la pregunta que más preocupa al ser humano. Afortunadamente, Dios en su amor ha dada amplia respuesta en su Santa Palabra. Nos explica que la vida es la asociación de dos elementos: el polvo y el aliento de vida (espíritu) proveniente de Dios (Génesis 2:7).
La muerte es el proceso inverso: el polvo vuelve a la tierra y el aliento de vida o principio vital impartido por Dios, regresa a Dios (Ec 12: 7).
La causa real de la muerte es el pecado (Romanos 6: 23).
El pecado pasó a todos los hombres y por eso todos tienen que morir (Romanos 5:12).
¿A DONDE VAN LOS MUERTOS?
Según la Biblia, los muertos van al sepulcro, donde duermen hasta el regreso de nuestro Señor Jesucristo. La palabra “infierno” significa sencillamente “sepulcro”, pero no es un lugar de sufrimiento perpetuo. En la Biblia no se menciona el “purgatorio”. Tampoco dice que los muertos van al cielo, pues la recompensa se dará a los justos cuando vuelva nuestro Señor Jesús y se produzca la resurrección.
¿PODEMOS COMUNICARNOS CON LOS MUERTOS?
En su desesperación, muchos deudos procuran entablar relaciones con sus seres amados muertos. Pero la Biblia es clara cuando enseña que los muertos no saben nada (Ec 9:5,6). Por lo tanto, no pueden comunicarse con nosotros, ni nosotros con ellos.
Debemos recordar que la primera mentira de Satanás se refirió a este asunto. Dios dijo a Adán que si pecaba moriría, pero Satanás replicó: “No moriréis”. (Gén. 3:4). Satanás sigue tratando de engañar con respecto a la muerte, y está empeñado en sostener su mentira original. Puede hacerlo fácilmente porque “se disfraza de ángel de luz,” (2 Cor. 11:14). También los demonios son capaces de hacerse pasar par gente muerta (2 Cor. 11:15).
Muchos de los fenómenos aparentemente inexplicables o sorprendentes son provocados par “espíritus de demonios, que hacen señales” (Apoc. 16:14). Por eso se nos insta: “No creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios,”(1 Juan 4:1). Dios, en la Biblia, condena terminantemente cualquier práctica ocultista o espiritista (Lev.19:31; 20:37; Isaías 8:19).
MARAVILLOSA ESPERANZA
1. La muerte es un sueño. Así como después de un arduo día de trabajo viene el sueño reparador, después de una vida larga y llena de trabajos, Dios nos concede un merecido sueño de descanso (Juan 11:11-14).
2. Resurrección. La muerte no es el fin de todo. La despedida al ser querido que parte no es definitiva, es simplemente un “hasta luego”. En la Biblia, en muchos lugares, se habla de la esperanza bendita de la “resurrección” (Isa.26:19; 1 Tes.4: 16;Juan 6:40).
3. Transformación. Al resucitar se poseerá un nuevo cuerpo, nueva mente y nueva personalidad (1 Co 15:42-44; 51 -56; Flp 3:20, 21).
4. No habrá más muerte. Como sucederá con todas las otras desgracias producidas por el pecado, Dios eliminará la muerte para siempre.